Descubriendo el mundo de sombras|Discovering the world of shadows

En estos días salimos a la playa en familia y como siempre mi mente está trabajando, creando y pensando en lo que me gusta hacer por medio de esta plataforma, pude captar este momento de mi hija con mi nieto, logrando tomar la sombra de este momento.

Primero pude captar a mi nieto abriendo su manito completamente con sus dedito abiertos viendo su sombra en la arena, le causó asombro ver su manito reflejada en la arena y comenzó a jugar con sus dedito, moviéndolos y admirado por la sombra que estaba observando.

La otra imagen que logré captar fue a mi hija tomando la mano de mi nieto, pero también apareció la sombra en la arena.

Sé que en nuestra vida muchas sombras nos asustan, como las sombras de problemas que nos persiguen a donde vamos o la sombra de aquel duelo que no logramos soltar, la sombra de ese dolor que me asfixia, la sombra de ese trabajo que tuve pero ya no estoy ahí y todavía lo añoro porque me he quedado estancado en esas cosas, es por eso que esas sombras nos persiguen, pero esos apegos o enganches que tenemos, pero no toda sombra es mala, la sombras nos cobijan, protegen, resguardan.

La sombra de estas dos fotos que pude captar es sombras hermosas, la primera sombra, refleja la inocencia de la niñez, ese conocerse, viendo su manito, y ver algo nuevo para él como lo es su propia sombra reflejada en la arena, para él esa sombra era desconocida, pero le permitió jugar un rato después que ya la sombra no le asustaba sino que le divertía, pues para mí que tomé la foto y lo observaba, me sirvió esa sombra para divertirme un rato con él.

La sombra de dos manos enlazadas, la mano de la madre agarrando la mano de su hijo, eso es amor. El amor ensancha el corazón, agarra, protege, cuida, se dona, cuando veía la sombra de la mano de mi hija enlazada con la de él, ya no tenía cara de asombro ni susto, si sentía seguridad, le agarraba la mano fuerte, y sentía protección de parte de su mamá.

La sombra del amor de una madre, es la sombra más hermosa de la vida de muchos de nosotros, es sentirnos protegidos, seguros, en su regazo, que de su mano nada podrá pasarnos, y eso lo sentimos por muchos años de nuestra vida, hasta que ya vamos creciendo nuestra madre empieza abrir sus manos y a soltarnos para que aprendamos a volar, a vivir, a independizarnos, a soltar nuestra comodidad y seguridades, pero no por eso nuestras madres no nos aman, todo lo contrario para ellas es difícil soltarnos también, pero ellas saben que todo eso es para nuestro propio crecimiento, es tal cual como una pajarita cuida a su pichoncito, a medida que va creciendo le va dando más soltura y dejando solo para que también aprenda a buscar el alimento, pero también está el momento que le enseña a volar para que así ya pueda seguir su vida.

En mi casa se acercan muchas aves y veo como las pajaritas los alimentan, pero también los preparan para la vida. Esto me recordó esta foto, la protección de una mamá, la seguridad, y la fuerza que agarró mi nieto para levantarse después que su mamá lo agarró, ya luego caminaron un poquito más hacia el agua, solo así sintió seguridad de esa sombra.

Mucho tiempo sin pasar por esta comunidad @melinda010100. Todas las imágenes son de mi álbum familiar. Equipo utilizado, mi celular Samsung J4. Mi firma con aplicación Canva. Traductor utilizado DeepL.