Primera versión (v1) – Trabajando con nuestro colocador.

En la primera versión me basé en analizar a nuestro colocador, era el puesto que teníamos más complicado, puesto que tan solo teníamos un jugador específico y sin un análisis del juego entrenado, es decir, sin haber entrenado la capacidad de decisión de la mejor opción para su equipo en todo momento.

Para ello empecé a medir dos aspectos:
• Reparto de juego:

Zona – Zona de envío de la colocación
% - Porcentaje de reparto de las colocaciones

En este ejemplo era el total de un partido fácil en el que se ganó 3-0, la premisa que se le encargó al colocador era jugar por zona centro todo lo posible y para ello lo medimos con la siguiente tabla.

• Reparto de juego en función de la calidad de la recepción:

Recepción – Se refiere a la calidad de la recepción:

1. Recepción mala que no permite juego
2. Recepción mala que permite juego por las alas con bola muy alta.
3. Recepción media dentro de la zona delantera que permite juego “cómodo por las alas”
4. Recepción perfecta que permite juego por zona centro.

Marcamos como objetivo que los mayores números en calidad 4 sean por zona 3 (marcado en verde) y en calidad 3 sean por las alas (zonas 2 y 4).

Como podemos comprobar el colocador de nuestro equipo cumplió sus objetivos.

Análisis de objetivos con el jugador:

El entrenamiento posterior al partido dediqué 5 minutos del entrenamiento para analizar con el colocador estos datos, primero dejando que el jugador me diera sus impresiones sobre si alcanzó o no los objetivos y después viendo los datos que sacamos del propio partido.

Conclusión:

El resultado fue positivo y el jugador entendió el mensaje, a partir de este momento es mucho más sencillo el análisis de cada uno de los partidos, por lo que me planteé mejorar el programa de estadísticas y ver otros aspectos del equipo que pueden resultar interesantes:

• Recepción
• Defensa
• Bloqueo
• Ataque