Con el juego y las manos vacías

lib1.jpg

Fuente

El sábado pasado se jugó el encuentro definitorio del torneo de clubes más importante de Sudamérica, la copa Libertadores.

Llegaron a esa definición el Fluminense de Brasil y Boca Juniors de Argentina; para el Flu, de ganar, sería su primer gran galardón, mientras que para Boca el séptimo y la posibilidad de alcanzar a Independiente de Avellaneda como los más ganadores del mencionado torneo; ambos se jugaban mucho, más quizás el conjunto argentino que lleva muchos años queriendo obtener esa séptima conquista, desde el 2007 para ser precisos.

Aquí los simpatizantes del club de la camiseta azul y oro estaban muy ilusionados con el triunfo, mucho más que lo que el equipo venía trasmitiendo en los torneos locales y también en las etapas previas de la Libertadores donde jamás se impuso con claridad a sus rivales. Boca es un equipo mediocre, solo impulsado por su historia, tradición y esa gran hinchada que lo sigue a todas partes como se vio sin lugar a dudas en Copacabana donde miles de sus fanáticos coparon un vasto sector de las playas desde días antes del partido. Decían entre cien y ciento cincuenta mil, quizás algo exagerado.

Yo que lo miro más desapasionadamente sabía que sería cuesta arriba para los xeneizes traer la séptima copa, no por lo que representaba Fluminense en sí sino más bien por sus propias limitaciones.

Y así fue, lamentablemente para todos aquellos que tenían esa ilusión.

Ese sábado, horas antes del partido, fui a visitar a mi madre que vive en el barrio de La Boca donde yo me crie y viví toda mi adolescencia y mis primeros años de juventud. La enorme mayoría de mis amigos de aquellos años, según muchos dicen los mejores de la vida, aunque eso es materia opinable, son simpatizantes del club de la Ribera y todo el barrio estaba en ebullición, las calles adornadas con los colores de boca, miles de turistas caminando por todas partes, muchos con la camiseta tradicional, banderas en edificios y casas. No alcanzó.

Definitivamente el resultado no acompañó, tampoco la actitud del director técnico y de algunos jugadores que perdieron todo el primer tiempo en la intrascendencia, solo mirando como el Fluminense los acorralaba, sin mucho peligro es cierto, pero con todo el protagonismo que es necesario para jugar y ganar un partido tan importante.

lib3.JPG

Fuente

El segundo tiempo fue algo mejor, al menos el equipo argentino puso un poco más de actitud y pudo llegar al empate que los llevó al alargue, más sufrimiento para muchos y Boca comenzó mejor, en algún momento me pareció que podían torcer la suerte del partido para su lado, pero justo cuando mejor jugaba Boca, vino el segundo gol del Flu y todo se vino abajo, como castillo de naipes al que un viento arrachado puso fin.

El DT Almirón, muy cuestionado antes y vuelto a cuestionar con el resultado puesto, no aguantó un día más como técnico del primer equipo y renunció apenas volvieron al país.

Una gran desilusión para muchos y enorme alegría para los fanáticos de River Plate su clásico rival y también para Independiente que podrá mantener el título de rey de América al menos un año más.

Por supuesto la mayor alegría fue para el Fluminense, un nuevo equipo que sumará el bello trofeo a sus ricas vitrinas.


With the game and empty hands

Last Saturday, the defining match of the most important club tournament in South America, the Copa Libertadores, was played.

Fluminense from Brazil and Boca Juniors from Argentina reached that definition; For Flu, if they win, it would be their first major award, while for Boca it would be the seventh and the possibility of reaching Independiente de Avellaneda as the most winners of the aforementioned tournament; Both had a lot at stake, more so perhaps the Argentine team that has been wanting to obtain that seventh conquest for many years, since 2007 to be precise.

Here the supporters of the club in the blue and gold shirt were very excited about the victory, much more than what the team had been transmitting in the local tournaments and also in the previous stages of the Libertadores where they never clearly prevailed over their rivals. Boca is a mediocre team, only driven by its history, tradition, and that great fan base that follows it everywhere as was undoubtedly seen in Copacabana where thousands of its fans took over a vast sector of the beaches days before the game. They said between one hundred and one hundred and fifty thousand, perhaps somewhat exaggerated.

I, who look at it more dispassionately, knew that it would be uphill for the xeneizes to bring the seventh cup, not because of what Fluminense itself represented but rather because of its own limitations.

And so it was, unfortunately for all those who had that illusion.

That Saturday, hours before the game, I went to visit my mother who lives in the La Boca neighborhood where I grew up and lived throughout my adolescence and early years of youth. The vast majority of my friends from those years, according to many say the best in life, although that is a matter of debate, are supporters of the Ribera club and the entire neighborhood was abuzz, the streets decorated with the colors of Boca, thousands of tourists walking through the streets, many wearing traditional t-shirts, flags on buildings and houses. Did not reach.

Definitely, the result did not agree, neither did the attitude of the technical director and some players who lost the entire first half in inconsequentiality, just watching how Fluminense cornered them, without much danger it is true but with all the protagonism that is necessary to play and win such an important match.

The second half was a little better, at least the Argentine team put a little more attitude and was able to reach the tie that led to overtime, more suffering for many and Boca started better, at some point it seemed to me that they could twist the luck of the game for their side, but just when Boca was playing best, Flu's second goal came and everything collapsed, like a house of cards that a gusty wind put an end to.

Coach Almirón, highly questioned before and questioned again with the result set, could not last another day as coach of the first team and resigned as soon as they returned to the country.

A great disappointment for many and an enormous joy for the fans of River Plate, their classic rival, and also for Independiente, who will be able to maintain the title of king of America for at least one more year.

Of course, the greatest joy was for Fluminense, a new team that will add the beautiful trophy to its rich showcases.




Héctor Gugliermo
@hosgug



0
0
0.000
11 comments
avatar

La mayoría de mis amigos y familiares directos son fanáticos de Boca y obviamente, a la espera de su séptima copa, todo era algarabía en el barrio y más aún en los grupos de WhatsApp. Como hincha de River, imaginarás mi alegría... solo diré eso.

Tres goles maravillosos de otro partido y más nada. Boca, sinceramente no venía jugando bien (venía a lo Boca, como se dice por acá), pero si se trata de merecimiento, creo que estaba para cualquiera.

Un abrazo Héctor y pronto nos veremos.

Saludos.

0
0
0.000
avatar

Así es amigo @palabras1! los hinchas de Boca sufren y los de River gozan, eso se repite continuamente, algunas veces le toca disfrutar a uno y otras al rival. La esencia del fútbol misma.

0
0
0.000
avatar

Boca nunca ha descendido, solo diré eso jeje.... fue un partidazo, Boca hizo un partido como lo venia haciendo en toda la competición, pero en este juego no les alcanzo, a pesar de eso, tuvo para ganar en los 90, y si vemos las condiciones adversas que tuvo durante su estadía en Brasil tampoco fue que los arrollaron en la cancha, al equipo Brasileño le costo ganarles.

0
0
0.000
avatar

Es verdad, no sabe lo sabroso que es salir campeón en lo más profundo y muchas veces, las categorías inferiores son mucho más rudas.

Abrazo amigo.

0
0
0.000
avatar

Es una broma amigo, un abrazo igual! 🫂

0
0
0.000
avatar

Boca es un equipo mediocre, solo impulsado por su historia, tradición y esa gran hinchada que lo sigue a todas partes como se vio sin lugar a dudas en Copacabana donde miles de sus fanáticos coparon un vasto sector de las playas desde días antes del partido.

Querido amigo, no podría estar más de acuerdo contigo aquí, por duro que sea; pues ya te había transmitido anteriormente mi simpatía por Boca -que data de mi infancia en los 90's cuando empecé a consumir fútbol y me tocó conocer gracias a la Libertadores aquellos años maravillosos del Xeneize... de eso poco y nada queda. De Agosto a la fecha Boca ha disputado 16 partidos, de los cuales solo ganó 3, los números son lapidarios y aún más lo ha sido la manera en la que los azul y oro han "jugado" al fútbol, así que yo tenía muy pocas esperanzas de que salieran avante en Río más allá de ver ese maravilloso colorido que siempre pone la hinchada Xeneize y que llevó hasta Copacabana.

Boca ha sido empuje, resistencia, especulación y muy poco fútbol bajo el mando de Almirón, como bien dices, un equipo mediocre empujado por el peso de sus historia y camiseta, más nada. Almirón no es entrenador para Boca y gran parte de la plantilla tampoco está para jugar en el equipo. ¿Alguien ha visto a Cavani desde que llegó al barrio de la Boca? Si lo encuentran que me avisen -no con esto quiero señalarlo a él en solitario-, mucho se habla del "Colo" Barco y poco apareció el muchacho en Maracana. En fin. Con muy poco, el Flu mereció más y la Copa es suya.

Abrazo de gol, amigo mío.

0
0
0.000
avatar

Es curioso y admirable que compartamos tantos conceptos viviendo a miles de kilómetros de distancia, evidentemente la visión del juego es el principal componente, potenciada por la imparcialidad que muchas veces nubla los ojos y las mentes de aquellos que son influenciados por la pasión. un gran abrazo querido amigo @pacoandujar

0
0
0.000
avatar

Hola de nuevo, querido Héctor.

Asumo que la capacidad de analizar y disfrutar del juego más allá de los colores no es una bendición con la que cuenta cualquier hincha. ¡Es bien bonito poder compartir conceptos e intercambiar algunos que otros contigo! Lo valoro mucho, en verdad.

Abrazo de gol, @hosgug.

0
0
0.000
avatar

La verdad es que lo poco que ví fue un partido parejo, pero para ser sincero no vi todo el partido. Según leí el partido fue una final bastante aburrida, no se que tan cierto lo fue. Lo que sí es que es un logro para Fluminense, me imaginaba un resultado así de parejo a pesar de que Boca en los últimos años y lo poco que he leído, no ha tenido los mejores resultados deportivos. Otra detalle que hay que destacar es el título de Marcelo en el club que no vió nacer como futbolista profesional.

Un abrazo.

0
0
0.000
avatar

Efectivamente querido @franz54, se dio un partido previsible, ninguno de los dos equipos tiene una gran calidad ni volumen de juego, según mi criterio cualquiera de los dos está sensiblemente por debajo de varios equipos de Europa. No es una sorpresa, sabemos de la sangría de jugadores de calidad que hay en Sudamérica, basta ver las plantillas de los grandes equipos europeos y ahora también en equipos de ricas ligas de Asia, todos llenos de latinoamericanos, aquí no queda nada.
Poderoso caballero es don dinero, decía Quevedo en uno de sus más recordados poemas que tuve que estudiar en literatura.

0
0
0.000
avatar

Palabras justas, yo lo veo igual. Boca siendo finalista de la Libertadores siendo un equipo que no ha ganado ni el 50% de los puntos en el año. Jugando mal en la mayoría y sin un equipo titular indiscutible. Jugadores cuestionados, un Cavani que decepcionó, un planteo raro de Almirón, sin mucho apoyo de sus referentes.
Pero es Boca, un equipo con HISTORIA en Libertadores, sobretodo en los años 2000. Pero hoy es otra realidad, un Barco con 19 años que la rompió toda, un Merentiel con sangre Uruguaya, un Romero siendo el mejor arquero de todos, que sin dudas gracias a él y sus atajadas en los penales lograron llegar hasta aquí.

Como Argentino e Hincha de River estoy contento por un lado de que no hayan ganado, pero con respeto porque tengo amigos y familia de Boca. Aún así, el fútbol Brasilero está en otro nivel, como era antes. Argentinos y Brasileros tienen mucho mas prestigio cuando vuelven a sus clubes, hoy los Cavanis, los Lanzinis están viniendo a Argentina a triunfar, eso hay que festejar para que crezca nuestro futbol!
Un abrazo grande!

0
0
0.000